La niacinamida, una forma de vitamina B3, es un ingrediente muy popular en el cuidado de la piel por sus múltiples beneficios. A continuación, te detallo algunos de ellos:

1. Hidratación y fortalecimiento de la barrera cutánea

Mejora la función de la barrera protectora de la piel al estimular la producción de ceramidas, que retienen la humedad.

Ideal para pieles secas o sensibles.

2. Reducción de manchas e hiperpigmentación

Inhibe la transferencia de melanina, ayudando a aclarar manchas oscuras y unificando el tono de la piel.

3. Control del exceso de grasa

Regula la producción de sebo, beneficiando especialmente a las pieles grasas o propensas al acné.

4. Efecto antiinflamatorio

Calma la piel irritada, siendo útil para tratar el enrojecimiento y afecciones como el acné, la rosácea o el eccema.

5. Propiedades antiarrugas

Estimula la producción de colágeno y elastina, mejorando la firmeza de la piel y reduciendo la apariencia de líneas finas.

6. Protección antioxidante

Combate los radicales libres, protegiendo la piel del daño causado por la contaminación y los rayos UV.

7. Reducción de poros visibles

Minimiza la apariencia de los poros al mejorar la textura de la piel.

8. Mejora de la textura general de la piel

Promueve una piel más suave, luminosa y uniforme.

La niacinamida es bien tolerada por la mayoría de las personas y puede combinarse con otros ingredientes activos como ácido hialurónico, retinol o vitamina C. Se recomienda usarla en concentraciones entre el 2% y el 10%, dependiendo de las necesidades de la piel.